Además del precio y la rentabilidad de un alquiler seguro, es importante analizar factores como el tiempo que permanece un inmueble en el mercado antes de alquilarse y la diferencia entre el precio final pactado para la renta y el inicial solicitado por el arrendador. En ambos casos, ARRENTA establece los datos recogidos en la siguiente tabla.
En referencia al tiempo transcurrido entre la salida del inmueble al mercado y el alquiler del mismo, es de esperar que, en una situación de menor demanda en el mercado, el número de días transcurridos hasta pactar el alquiler sea creciente y viceversa, a mayor demanda, menos días de permanencia en el mercado.
Cada vez son más los propietarios que desean un alquiler seguro, garantizando el cobro y comparando seguros de alquiler, el problema es que solo cubren de 6 a 12 mensualidades. Es por ello que SEAG es la alternativa a un seguro de alquiler, garantizado el cobro de manera indefinida hasta recuperar la vivienda.
Con respecto al cociente entre el alquiler final pactado y el alquiler solicitado por el arrendador, en un mercado regido por la demanda será decreciente, producto de una mayor negociación entre arrendador y arrendatario.
La demanda ha sido ligeramente creciente durante 2019 respecto al 2018, pues los días necesarios para alquilar el inmueble han disminuido.
Asimismo, el poder de negociación se ha mantenido constante en niveles bajos, pues el alquiler final apenas es un 2% inferior al alquiler ofertado, reduciéndose en el último año en casi un punto porcentual.
Datos extraídos de INESE